CRISIS SOCIAL
En San Luis cada vez hay más personas en situación de calle
La presencia de ciudadanos durmiendo a la intemperie ya no es problemática exclusiva de Buenos Aires y las grandes ciudades en la Argentina. En San Luis desde tiempo las imágenes se repiten en distintos sectores del centro.
San Luis está sumergida en una grave realidad social y económica que quizás unos años atrás, nadie hubiera imaginado. Para los sanluiseños no era habitual caminar una noche por el centro de la ciudad y encontrarse con una vulnerabilidad extrema. Pocas veces se cruzaban a una persona en situación de calle, pero hoy es cada vez más frecuente y doloroso.
La falta de oportunidades de trabajo es quizás el principal desencadenante para esta situación. La ausencia de políticas del Gobierno nacional, provincial y municipal agravan e intensifican el abandono que padecen quienes no cuentan con techo y así, viven en la indigencia.
El crecimiento de la pobreza es innegable e indiscutible, lo confirman las calles y los datos alarmantes que arrojó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El informe reveló que en el segundo semestre del 2022 la pobreza fue del 45,2% y en los últimos cuatro años aumentó un 152,5%.
Un equipo del El Chorrillero recorrió la ciudad y las imágenes captadas exponen que, las calles, las plazas y algún reparo, se convierten en el único refugio para quienes no tienen un hogar. Así, cada noche varios sectores del microcentro, dan cuenta de la crueldad, la desigualdad y la desgracia con la que se enfrentan en la cotidianidad.
Se los puede ver durmiendo en la Plaza Pringles, en el Paseo del Padre, en la los sectores de cajeros automáticos de los bancos y aquellos locales comerciales que tienen un reparo, porque lo cierto es que el frío llegó y permanecen donde pueden.
Otro de los puntos es la Ediro donde pueden encontrar mayor resguardo y un techo. Pero también es común cruzarse a personas en algunos puentes, como en la intersección de la Circunvalación y Riobamba.
Este contexto crítico golpea más fuertemente a los sectores sociales cuyos ingresos provienen de la informalidad y la problemática tiende a agravarse.
Como es el caso de Elías Bazán y Franco Fernández que hace cinco meses llegaron a la capital en busca de una estabilidad. Ambos, juntos a otras tres personas pasan las noches en la cochera de un edificio ubicado frente al casino “Nueva York" por calle Pedernera.
“Yo estaba durmiendo en los barrios, estoy en situación de calle, y hace un tiempo me vine para el centro porque hay mucha inseguridad, y me encontré con Franco. Andamos juntos porque nos cuidamos, está peligrosa la calle”, dijo Elías.
Franco durante el día trabaja en una carnicería y Elías como cartonero, juntos están reuniendo dinero para poder alquilar un lugar donde vivir, al menos durante el invierno.
“Nos levantamos a las 8 y nos vamos a un comedor que nos permite bañarnos, nos dan de desayunar y después vamos a trabajar. Hemos estado en algunos sitios en donde vos trabajás para ellos y te dan un lugar para descansar, pero te roban y hay más droga ahí adentro que en la calle”, manifestó Elías.
Aseguraron que la única ayuda que han recibido es por parte de la Iglesia y de los corazones solidarios de los puntanos.
En el Paseo del Padre desde hace ocho meses duerme en uno de los stands, un hombre de 56 años llamado Leonardo. También lo apodan “Mendoza”.
Una vez que los negocios bajan todas las persianas Leonardo prepara su cartón, se acuesta y con fina colcha se tapa. Por el día deambula por las plazas de la ciudad. Separado desde hace tiempo y con hijos, el hombre es otro invisibilizado por la sociedad que para tapar el hambre y teñir su realidad, se sumergen en adicciones.
Sábanas, trapos y hasta toallones sirven para hacerle frente al frío, con solo eso se envuelven para poder descansar y olvidarse de la realidad que viven. Mochilas o bolsas son utilizadas como almohadas.
Los bancos como el Galicia es otro de los elegidos para pasar las noches, también aquellos locales como la zapatería Dominó donde normalmente duerme un hombre de mayor edad.
El Chorrillero también dialogó con los comerciantes del centro, quienes manifestaron que después de las 22 ven a las personas llegar y al día siguiente a la hora de abrir sus locales ya no están.
“Siempre viene gente a dormir acá en el Paseo, buscan un techo para resguardarse. Por mi parte, consulté a los policías que andan por la zona y me comentaron que son inofensivos, gracias a Dios nunca sucedió nada”, explicó la dueña de una local de indumentaria del Paseo.
Según registraron los datos definitivos del Censo 2022 difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) en la Argentina hay 2962 personas en situación de calle y San Luis forma parte del ranking con más personas en estas condiciones. Datos recientes posteriores al Censo dan cuenta que el número es superior en el país.
La realidad que esconden las calles de San Luis es dolorosa y muchos la desconocen. Quizás es más común para quienes circulan a diario por esos puntos llenos de soledad y abandono. Lo cierto es que cuando todo queda casi en silencio, sin movimiento y cae la noche, muchos van a sus hogares a descansar y otros, que no tienen esa posibilidad, buscan un refugio en una vida que no es vida.